SESIONES DEL 24 DE ABRIL DE 1936.

Acta de la sesión extraordinaria celebrada por el Ayuntamiento el día 24 de abril de 1936. 

En la Villa de Paterna de Rivera, siendo las veintiuna y media del día veinticuatro de abril de mil novecientos treinta y seis; previa convocatoria hecha en forma reglamentaria, se reúnen en el salón de actos de esta Casa Consistorial, los Señores del Ayuntamiento que al margen se anotan [Señores asistentes: Ramón Dávila Díaz, Francisco Coca Santos, Bartolomé Rosado Calderón, Gonzalo Cote Jaén, Antonio Piñero Barroso, Antonio Traverso Fernández, Diego Dávila Díaz y Manuel García González. Secretario: Federico Villagrán Galán], con el fin de celebrar esta sesión extraordinaria y publica, para ella ver y fallar el expediente instruido contra funcionarios de este Ayuntamiento, y siendo la hora señalada, por el Señor Presidente Don Ramón Dávila Díaz, se declara abierta teniendo que abandonar el salón casi a continuación por causa imprevista (1), pasando a la Presidencia el Primer Teniente de Alcalde Sr. Coca Santos, resolviéndose los siguiente: 

Único.- Como era único objeto de la convocatoria, la Corporación conoció del expediente instruido contra el Administrador de Exacciones Municipales, Sebastián Barroso Benítez, el Auxiliar de la Administración Francisco Torres Barrios y otros subalternos y vistas las actuaciones seguidas por el Concejal designado Juez Instructor del expediente, documentos aportados, declaraciones prestadas, pliegos de cargos contra los dos recurrentes y descargos de los mismos, y considerando el Ayuntamiento todos los cargos probados, gravísimos en su mayoría hasta el extremo de considerarse punibles por el Juez Instructor y confesados algunos espontáneamente por los interesados y sin contestación otros y faltos de fundamento los descargos, el Ayuntamiento, constituido con las garantías que determina el artº 196 de la Ley Municipal vigente, acuerda por unanimidad la destitución definitiva de los funcionarios citados, a los que se le comunicará este acuerdo y se le harán las advertencias reglamentarias sobre los recursos que a su derecho conduzca. 

Y no siendo otro el objeto de la convocatoria, se levantó la sesión, siendo las veintidós y media horas, firmando la presente los Señores asistentes con el Secretario que de todo certifico. 

[No figura ninguna firma] 

Nota: (1) Está muy extendida la idea de que el abandono por parte del Alcalde de la sesión estuvo motivada por los disturbios de esa noche, que derivó en el asalto de la iglesia parroquial, con su saqueo e incendio. 

REPRODUCCIÓN FOTOGRÁFICA (Fuente: Archivo Municipal de Paterna de Rivera): 

BOLETÍN OFICIAL DE LA PROVINCIA (BOP).

Fuente: "BOLETÍN OFICIAL DE LA PROVINCIA DE CÁDIZ", de 3 de abril de 1936, Nº 081, aviso núm. 1047. Junta Municipal del Censo Electoral. 

Fuente: "BOLETÍN OFICIAL DE LA PROVINCIA DE CÁDIZ", de 3 de abril de 1936, Nº 081, aviso núm. 1058. Ministerio de la Gobernación. 

Fuente: "BOLETÍN OFICIAL DE LA PROVINCIA DE CÁDIZ", de 9 de abril de 1936, Nº 087, aviso sin número. Junta Municipal del Censo Electoral. 

Fuente: "BOLETÍN OFICIAL DE LA PROVINCIA DE CÁDIZ", de 10 de abril de 1936, Nº 088, aviso núm. 1068. Gobierno Civil. 

Fuente: "BOLETÍN OFICIAL DE LA PROVINCIA DE CÁDIZ", de 18 de abril de 1936, Nº 094, aviso núm. 1230. Junta Municipal del Censo Electoral. 

¿DE QUÉ SE HABLABA ESTE DÍA? 

Más que en este día, habría que señalar los siguientes con el tema de los disturbios provocados en la noche de 24 de abril, y nada mejor que relatar los hechos de la mano del historiador José Luis Gutiérrez Molina, transcrito de su obra “CASAS VIEJAS: del crimen a la esperanza; María Silva <Libertaria> y Miguel Pérez Cordón, dos vidas unidas por un ideal 1936-1939)”:

«… En Paterna también hubo ese día de marzo manifestación [se refiere el autor a los graves disturbios antirreligiosos ocurridos en Cádiz el 8 de marzo de 1936]. No se produjeron incidentes pero su alcalde como otros de la provincia recibieron telegramas del Gobierno Civil [José Montañés Serena / Mariano Zapico Menéndez-Valdés] ordenando que mantuvieran especiales medidas de seguridad sobre iglesias y conventos. … En Paterna, como en otras localidades, se procedió a la incautación de armas, no así a la detención de falangistas por la sencilla razón de que no existían.

… El viernes 24 de abril un grupo entró en la iglesia a través de la casa del párroco [Manuel Barberá Saborido, aunque no vivía ahí desde un mes atrás], que saquearon. Después llegaron a la sacristía y abrieron y vaciaron los cajones, amontonaron la ropa y los utensilios litúrgicos que fueron sacando a la calle. Finalmente pasaron al templo, donde fueron cogiendo las imágenes de santos y vírgenes y también las amontonaron en la calle. Después les prendieron fuego. En el informe que sobre las destrucciones ocurridas durante la <dominación roja> envió el gobernador civil de Cádiz al fiscal instructor de la Causa General a finales de 1942 se nombraba que entre los daños que habían sufrido los edificios religiosos de la provincia estaba la iglesia parroquial de Paterna.

… En el caso de la parroquia de Nuestra Señora de la Inhiesta los daños habían alcanzado tanto al propio edificio como al mobiliario. Parece que no fue así, que fueron menores, pero el informe de las autoridades franquistas dijeron que el retablo mayor había ardido por completo y otros estaban muy dañados. Entre los cuadros e imágenes desaparecidos estaban la de Nuestra Señora de la Soledad, patrona de la localidad, y otra de Nuestra Señora del Rosario. Esta última esculpida en el siglo XVIII, como un cuadro que también se quemó.

Horas después la Guardia Civil detuvo a quince personas, a las que acusó de ser las autoras del asalto. Unos hechos de origen confuso y autoría no aclarada. En el momento, y durante muchos años, se acusó al alcalde Ramón Dávila Díaz de haber actuado, cuanto menos, con pasividad. También se dijo que se preparó en una reunión celebrada en el centro obrero. De allí partieron las personas que entraron por la puerta trasera de la iglesia. El cura Barberá, durante la guerra, acusó a quien llamaba <Quijada de plata> de haberle acosado y de ser el responsable del asalto que le había dejado sin casa ni ropa. Desconozco a quién se pueda referir.

Las consecuencias más inmediatas fueron la apertura de un sumario, el 50/36, por el juez de Instrucción de Medina Sidonia, y el cese fulminante de Dávila, sustituido por Francisco Coca, por no haber cumplido con el suficiente celo las instrucciones que había recibido desde marzo precisamente sobre incidentes de este tipo. El asalto había ocurrido cuando el Ayuntamiento celebraba sesión a pocos metros de distancia y, hasta que no terminó, no intervino. También, de forma indirecta, afectó a Federico Villagrán Galán, el secretario municipal y encargado de las obras que realizaba la Fundación de Elías Ahuja. No informó de lo ocurrido al millonario hasta varios días después y quitándole importancia. Ahuja fue informado por otras personas que, de alguna manera, le avisaron de su actitud izquierdista ...”»

Fuente: “CASAS VIEJAS: del crimen a la esperanza; María Silva <Libertaria> y Miguel Pérez Cordón, dos vidas unidas por un ideal 1936-1939)”, pp. 113-115, José Luis Gutiérrez Molina, 2008. 

Acta de la sesión extraordinaria celebrada por el Ayuntamiento el día 24 de abril de 1936. 

En la Villa de Paterna de Rivera, siendo las veintiuna horas del día veinticuatro de mil novecientos treinta y seis; se reúnen en el salón de actos de esta Casa Consistorial, los Señores del Ayuntamiento que al margen se anotan [Señores asistentes: Ramón Dávila Díaz, Francisco Coca Santos, Bartolomé Rosado Calderón, Gonzalo Cote Jaén, Antonio Piñero Barroso, Fernando Pérez Domínguez, Diego Dávila Díaz y Manuel García González. Secretario: Federico Villagrán Galán], con el fin de celebrar esta sesión extraordinaria y publica de primera convocatoria y en ella tratar de la dimisión que presenta el Presidente de la Corporación Don Ramón Dávila Díaz y dando cuenta de ello por el referido Señor del motivo de la convocatoria se acuerda: 

Único.- La Corporación conoció de la dimisión que del cargo de Alcalde-Presidente presenta Don Ramón Dávila Díaz, dimisión que acuerda la Corporación admitir por unanimidad y por unanimidad también resuelve en votación designar para la Presidencia del Ayuntamiento al Primer Teniente de Alcalde Don Francisco Coca Santos, para Primer Teniente de Alcalde a Don Bartolomé Rosado Calderón y para Segundo Teniente de Alcalde a Don Gonzalo Cote Jaén. 

Con ello y dándole posesión de sus respectivo cargos se levantó la sesión siendo las veintidós y media horas, firmando la presente acta los Señores asistentes, con el Secretario que de certifica. 

[No figura ninguna firma] 

REPRODUCCIÓN FOTOGRÁFICA (Fuente: Archivo Municipal de Paterna de Rivera): 

DETALLE DE PUBLICIDAD:

Fuente: “CRÓNICA”, Madrid, año VIII, núm. 337, domingo 26 de abril de 1936. 

PRÓXIMA ENTRADA:

sesión ordinaria del 4 de mayo de 1936, a las 20:00 h.